por MartaGPeris | Oct 5, 2017 | PK
En Proyecto Kahlo este mes hablamos de Despedidas. Las rupturas de pareja son despedidas. De ti, de tu pareja, de lo que fuisteis, de lo que pensasteis que ibais a ser. Y a veces pensamos que salir adelante va a ser difícil. Pero ¿sabes qué? Estarás bien. Pinchando aquí podéis leer mi escrito. Dedicado a todas esas personas que supieron despedirse bien, con respeto y cariño. A las personas que lo hacen como un elefante en una cacharrería, atropellando emociones y manchando lo que fueron y lo que son… a esas personas ya les dedicaré otro. Este no. Este es para las personas de corazón. La ilustración que me acompaña es de Javitxuela. Gracias,...
por MartaGPeris | Sep 18, 2017 | escritos
Muchas veces nos cargamos a nuestras espaldas nuestras mochilas y las de los demás. De golpe y porrazo pasamos de ser un ser humano más a la persona sobre la que se sustentan hasta las leyes de la física. Hay veces que lo vemos, nos damos cuenta de lo que ello supone, abrimos los ojos y decidimos querernos y cuidarnos. Otras veces hemos pasado de nuestras señales de alarma, hemos ignorado todo lo que indicaba que no podíamos seguir por ahí, nos hemos dicho que podemos seguir adelante, nos hemos exigido una sonrisa cuando no apetecía y hemos llenado el tiempo de millones de cosas para no darnos cuenta de que no podemos más. Hasta que algo nos hace parar de golpe y nos obliga a abrir los ojos y a mirar hacia adelante. Sin alternativa. Lleguemos por nuestra cuenta u obligadxs por personas o circunstancias casi siempre nos encontramos lo mismo. Nos damos cuenta de que hace tiempo que nos hemos ignorado y que, si nos pudiésemos llamar a nosotrxs mismxs, comprobaríamos que tenemos cientos de llamadas perdidas, mensajes en el buzón de voz y whatsapps sin contestar. Hemos pasado de las señales de alarma porque en esta sociedad de postureo y hastags el de #nopuedomás no se lleva. Porque sentimos que no tenemos derecho a cuidarnos o que somos egoístas si lo hacemos. Si no tienes trabajo es porque no lo has buscado. Si no estás contentx con el trabajo que tienes «no tienes derecho a quejarte» -¿perdona?- porque «al menos tienes trabajo». Si tu relación de pareja no te satisface es porque «pides demasiado» y si...
por MartaGPeris | Ene 4, 2017 | escritos
Te fuiste y me quedé esperando. Dijiste que no volverías, que no había nada que hacer, que ya nuestro tiempo había pasado. Que había terminado. Te ofrecí un tiempo -en el que no creía-, te dije que estaría aquí si regresabas, que no me movería. Te fuiste y me quedé pensando. Al día siguiente me levanté con el regusto del café. La vida era diferente, la luz había cambiado, la ducha no reconfortaba como antes y pensé que nunca más volvería a tener algo así. En eso no me equivocaba, cada relación es única, cada momento genuino y cada pareja -persona- escribe un capítulo diferente en el libro de tu vida. Pasaron horas, pasaron días y, al final, el tiempo todo lo cura. Las heridas que no cerraban, sanaron. Los pensamientos que no se iban, cambiaron. Las posibilidades que no encontraba, aparecieron. Las oportunidades para seguir adelante, las creé. Te fuiste y me conocí. Pensé en mí como nunca lo había hecho. Me quise, me cuidé y me consentí como nunca. Y me di cuenta, de que me caía bien, que me llevaba bien conmigo misma y que estaba dispuesta a vivir así el resto de mi vida. Te fuiste y crecí. Quedaron millones de historias, de momentos, de todo lo que aprendí contigo, de todo lo que descubrí de mí. Quedó muchísimo amor que guardé bien. Te fuiste y nos veíamos. Y mucha gente levantaba una ceja, porque con «los ex» no se habla. Como si perteneciéseis -perteneciésemos- todos los que sois -somos- «ex-algo» a un grupo que no tiene permitida la entrada en algún sitio. Porque parece...