Átame

Hace unos días Felipe VI comentaba en la entrada «Háblame del mar, marinero» lo siguiente: «¿Qué opinión te merece que para el disfrute de una buena sesión de sexo suela requerir de un atamiento y estimulación progresiva del cuerpo femenino? ¿Debería ir contra ello y fomentar el sexo más «normal»? Está claro, y lo he comprobado, que no a todas les gusta ser atadas, aunque sí a bastantes, y menos recibir cosquillas, un buen principio a mi modo de ver.«
En las relaciones sexuales siempre hay que llegar al punto del común acuerdo. A mi me apetece atarte, a ti practicar el sexo en un lugar público, al otro con las luces apagadas y al de más allá hacerlo delante de un espejo… ¿cual es el límite? En mi opinión, ninguno siempre y cuando sea consensuado.
 595332_DTY1WU38SYQMW1N3F5PTGF2Q7SXX7H_bondage-1_H183447_L
Hay muchas y diferentes maneras de disfrutar el sexo, casi me atrevería afirmar que tantas como personas existen ya que por algo (y menos mal) somos únicos y diferentes. Y tú preguntas si existe algún problema en que te guste atar a tu compañera de cama…supongo que el único problema es cuando únicamente puedes disfrutar del sexo de esa manera porque no siempre tu pareja querrá o, dependiendo del lugar, no siempre se podrá pero, por lo demás, no le veo ningún problema.
De hecho el atar y dominar o dejarse atar y someterse suele ser una fantasía bastante común junto con la de tapar los ojos al compañero de cama y que mucha gente practica ayudados de pañuelos o esposas mulliditas.
 50shades
Sobre lo de «fomentar el sexo más normal» te respondería con ¿qué es el sexo más normal?. El atar a alguien en cierta medida no deja de ser el establecimiento de una relación de poder pero esa misma relación la encontraremos en aquella persona que siempre lleva la iniciativa, aquella otra que elige una postura superior para tener el control, etc. Vamos, que tan raro es que te guste atar o que te aten como que te guste que te practiquen sexo oral o practicarlo: nada.
En cuanto el tema de las cosquillas es, como lo anterior, cuestión de gustos. Si que es verdad que hay gente a la que le gusta iniciar así la relación sexual pero a otras muchas personas eso les «corta el rollo». ¿Por qué? Porque cuando iniciamos una relación sexual entramos en clave erótica, estamos, por decirlo de alguna forma, centrados y enfocados en ello y, las cosquillas, en muchas ocasiones, hacen que salgamos de esa clave erótica. Pero supongo que lo ideal, como bien decía Aristóteles, está en el término medio: caricias que provoquen cosquilleo y excitación pero que no hagan que me muera de risa y me distraiga del ambiente creado.
¿Y vosotros que opináis? Como siempre sería un placer leer vuestras opiniones y comentarios. Gracias, Felipe VI por ponerte en contacto conmigo y hasta la próxima!

Etiquetas: , , , , ,


3 Comentarios

  1. Realmente todo depende de la situación, el lugar y de el momento personal, porque no todos los días te apetece lo mismo, o estas predispuesto. En cambio hay días en que estas más abierto a experimentar cosas nuevas, y si a tu pareja también le apetece, las pones en practica. Además siempre es bueno innovar de vez en cuando.

    Responder
  2. totalmente de acuerdo con los 2. que mala costumbre de poner siempre etiquetas de sexo normal o no y que caras que reflejan este es un perturbado cuando se habla de atar a alguien. la gente es muy abierta de miras hasta que no lo0 es.

    Responder
  3. Muchas gracias, Marta, por tu explicación clara, a la vez delicada y edificante. Comparto todo lo que dices, el límite ilimitado se pone de mutuo acuerdo, y… ¿qué es normal?
    Solo que a veces uno se deja empujar demasiado por las presiones sociales y familiares que todos, queramos o no, arrastramos. Es este otro buen tema sobre el sexo…
    Seguiremos en contacto por aquí, y lo dicho, gracias otra vez.
    Un saludo!
    PD: dejaré de atar a la gente sin su consentimiento… XD

    Responder

Enviar comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR ACEPTAR
Aviso de cookies