Existe vida más allá del coito

Por mucho que sepamos que una relación sexual implica algo más que un coito e, incluso, puede darse sin la existencia de éste, es muy común que la gente entienda que «mantener relaciones sexuales» se limita a eso, porque vivimos en una sociedad muy coitocéntrica en la que parece que esa es la única medida válida y que ser virgen o no -según su idea de virginidad- es un estigma que hay que arrastrar a las espaldas. Estamos acostumbrados a escuchar a la gente hablar de juegos preliminares. Ahí lo tenéis, preliminar, el preámbulo a algo, como si esos juegos fuesen el telonero del grupo al que hemos ido a escuchar. Eso lo único que hace es centrar la relación en el coito, poner toda la presión en él. Podemos besarnos de manera apasionada, tocarnos, acariciarnos, excitarnos, practicar sexo oral pero parece que todo ello sólo es la mecha para que se dispare el gran cohete: el coito. Tendríamos que considerar una relación coital por lo que realmente es, una práctica sexual más, no un fin, quitarle la importancia que se le ha dado y entender que muchas veces otras prácticas son incluso más íntimas que esa. Al poner al coito en un pedestal lo único que estamos haciendo es relativizar la importancia del resto y, sin embargo, nos encontramos con millones de problemas por culpa precisamente de ello. En el caso de las mujeres, tras millones de encuestas repetidas hasta la saciedad, hemos visto como muchas de ellas afirman que prefieren los juegos que tienen antes, que el coito en sí. Al mismo tiempo, por consulta aparecen muchísimos hombres con...

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR ACEPTAR
Aviso de cookies