La infidelidad…tema complicado donde los haya porque ¿qué es ser infiel?. Para unos un coqueteo, para otros un beso, hay quien no lo considera infidelidad si no se llega al coito y otros dicen que cualquiera de las anteriores si intervienen los sentimientos. Lo que está claro es que, ante tanta posibilidad, lo primero sería «matizarlo» con nuestra pareja ya que no seríamos los primeros sorprendidos al encontrarnos al otro con otra persona y que nos diga «no pasa nada, ¡si es fuera del país no cuenta!».
Durante mucho tiempo se ha pensado que el hombre es más infiel que la mujer y se alegaba en su defensa que éste tenía una urgencia sexual que ella no sentía. Como ya vimos anteriormente en: «¿El deseo sexual es mayor en los hombres que en las mujeres?«, esto no es así por lo que lo descartamos, pero, me pregunto yo ¿realmente la infidelidad es más habitual en el sexo masculino?. Ahí llegamos a otra idea que surgió a partir de lo anterior: que la mujer engañaba más pero mejor, es decir, era más «lista» y se le pillaba menos. Mientras que, por otro lado, se oyen afimaciones y prejuicios que dicen que son las parejas homosexuales las más infieles.
¿Qué hay de cierto en esto? Yo diría que nada, ya que las encuestas son limitadas, las respuestas no suelen ser sinceras y, además, abarcan a grupos muy determinados de nuestra sociedad. La infidelidad es cuestión de personas, independientemente de sexo u orientación sexual y, lo más importante, ¿que más nos da?. Sea quien sea el más infiel (esto empieza a parecerse a un concurso tipo «¿Quieres ser millonario?»), sólo nos afectará cuando estemos en alguno de los dos lados: engañando o siendo engañado, y ahí de nada nos servirá el «cariño, es que casi todas las mujeres engañan…» o «lo siento, es que según esta encuesta los homosexuales somos así».
Muchos de vosotros (37 personas, ¡gracias!) os habéis animado a responder a la encuesta «¿Has sido, eres o serías infiel a tu pareja?» y la situación está muy equilibrada , habiendo respondido «no» un 53% de la gente y «si» el 47% restante. Por los pelos gana la fidelidad y, en cuanto a sexos, nos quedamos con el mismo equilibrio, ya que ambos se han quedado en los mismos porcentajes.
Si entrasemos en el «motivo» por el que se es infiel, que es lo que todo hijo de vecino termina preguntando, nos encontaríamos todo tipo de razones pero, no nos engañemos, no hay leyes y mandatos, cada cual que engaña lo hace de una forma y por un motivo determinado, eso si, todos comparten el mismo entorno: la mentira. Digo yo, que si uno es así y quiere experimentar con más gente que con su pareja, o no le va lo de la monogamia, etc. hay algo tan fácil como exponerlo, decirlo y, si es necesario, negociarlo…ya la otra persona decidirá si le interesa o no.
¡Ser felices! seáis pareja o amantes….o ambas!
Etiquetas: deseo sexual, desmitificando, encuesta, hombre, homosexualidad, infidelidad, mujer
ir de señoritas que fuman es ser infiel?? ahi no hay sentimientos!!
Lo que está claro es que es un tema complicado. Pero el mayor problema viene por la importancia que se le da a las relaciones genitales. Si no fuese así,todo cambiaría muchísimo!
Porque valorar cómo funciona tu pareja en función de dónde tenga los genitales, es reducir el afecto al acto, no?
Besotes Marta!
Anónimo, eso es lo que comentaba, que todo depende de lo que cada uno considere por infidelidad, habrá quien piense que si no hay sentimientos no lo es y quien piense al contrario.
Mónica, si que es verdad que todo está muy genitalizado pero yo voy más allá de eso, hablo de "romper" en cierta forma la confianza creada con tu pareja, independientemente o no de que haya relaciones sexuales explícitas…nuestra pareja nos será infiel en función de las "normas" que nosotros mismos tengamos y creo que si se puede ser infiel a alguien aun habiéndole quitado toda importancia a los genitales 🙂
Gracias a los 2 por vuestros comentarios! Un placer teneros por aquí!