Las palabras mágicas

 Fuente: Pinterest

Seguro que muchos de vosotros sabéis cuales con las palabras mágicas, de hecho más de uno/a seguro que ha «educado» a alguien en ellas y es que es algo que sabemos pero, desgraciadamente, algo que también olvidamos.

POR FAVOR

PERDÓN

GRACIAS

Mira que son fáciles de recordar, ¿verdad? y no hace falta que entremos en detalles de cuando y cómo se utilizan, ¿o si?

El otro día estando en la cola de un supermercado vi como unos padres «ajetreados» no saludaban a la dependienta, le daban el dinero y se iban a ir hasta que se oyó la voz de su hijo de unos 5 años «¿no le dais las gracias?»… fue como un disparo a bocajarro y los padres se quedaron como quienes miran a Medusa a los ojos, uno de ellos se volvió, sonrió a la cajera y le dijo «muchas gracias, que tenga buena tarde» y ella respondió con una sonrisa de oreja a oreja.

Y es que pasa, lo sabemos, lo conocemos pero muchas veces vamos en nuestra burbuja particular y, al estar rodeados de tantas cosas tan automatizadas, nos olvidamos de lo que hay a nuestro alrededor… PERSONAS.

Pero no sólo queda aquí ya que, como somos seres de costumbres, muchas veces nos lo llevamos a casa. ¿Hace cuanto no le das las gracias a tu pareja/padres/amigos/hijos/etc. por algo que hacen? y no hablo de algo excepcional sino de algo que hagan en su día a día, alguna de esas cosas que como damos por sentadas parece que pasan desapercibidas. Házlo, plantéatelo, piensa en ello y da las gracias, a todos nos gusta sentir que se valora lo que hacemos, que se nos quiere y respeta.

«Por favor»… ejem, como se dice siempre «la confianza da asco» y muchas veces eso nos hace olvidar que muchas veces la gente hace cosas por nosotros que no son su «obligación» que igual no son «tonterías» o «no le cuesta nada» o «de eso siempre se encarga él o ella» pero que, al fin y al cabo, son gestos, regalos que nos hacen… ¿y si además de estar agradecidos lo pedimos como corresponde? Así las cosas se hacen mucho mejor y no sólo utilizando el «por favor» como método de barrera ante un posible «no» que eso es chantaje emocional.

¿¿Y el perdón?? Esto es otro cantar!! Hay gente para la que reconocer un error es simplemente algo atroz, algo que daña su ego y antes muere que decir un «tienes razón, me he equivocado, ¿podrías perdonarme?». Pero la verdad es que todos nos equivocamos, todos cometemos errores, no somos perfectos y a veces nos salen comentarios desafortunados, hechos inadecuados, etc. Si pasa eso ya sabes lo que toca, pedir perdón y saber que en la mano del otro está el aceptarlo o no, ¿será por eso por lo que tenemos tanto miedo a veces? Para darle una vuelta…

Así que yo os propongo que utilicemos más a menudo estas palabras, ¿que os parece? ¿me haríais el favor? Muchísimas gracias y, ya sabéis, perdonadme si os he ofendido en algo 😉

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