Pero no de las rupturas en general sino de cuando tu pareja te deja por otra persona.
Pero no por una persona cualquiera sino por su ex.
Esto es lo que ella quería porque afirmaba que eso es lo más doloroso que te puede hacer alguien.
Las relaciones de pareja pueden ser realmente maravillosas y, por eso, cuando una acaba, duele. Y mucho. Y sentimos pena, angustia, impotencia, rabia, desilusión, -añade aquí lo que sientas tú-… y, como parece que nos sabe a poco, nos ponemos en modo freudiano e intentamos averiguar el porqué, el motivo, el origen… con ese impulso que nos sale de dentro, como el que se toca una y otra vez una herida con la falsa esperanza de que una de esas veces no vaya a doler tanto.
El amor se termina, a veces los caminos se separan y no sirve de nada aferrarse a algo que ya no late, que no está vivo. Lo mismo da que te dejen por alguien o por otro motivo porque la consecuencia es la misma: ya no está contigo.
Los fantasmas de las «ex» persiguen a muchas personas y, si se da el caso de que tu pareja vuelve con la suya, el monstruo de las inseguridades y del miedo te pasa una nota por debajo de tu puerta que dice «a ti nunca te quiso, siempre pensó en ella» e inmediatamente le creemos porque… ¿quien no creería a un monstruo? uy! pues ahora que lo digo, igual es un poco absurdo, ¿no crees? Igual estamos dejando hablar a nuestras inseguridades a pesar de que ellas nos va a hacer aún más daño.
Quédate con lo bueno que vivisteis juntos, no des vueltas a lo que ha pasado, ¿no quiere estar contigo? ¡él se lo pierde! y, si te crea más consuelo, piensa que ahora tú eres su ex y eso, por suerte o por desgracia, es para toda la vida independientemente del tiempo que hayáis estado juntos 😉
Etiquetas: dudas, ex, pareja, ruptura
Excelente y muy de acuerdo con tu visión y punto de vista.
Saludos desde Montevideo, Uruguay
Nattiva
gracias por tu comentario, Nattiva 🙂 ¡un besazo!